lunes, 22 de febrero de 2010

Más hormigas

Por eso te digo lo que te digo. Hace rato que las sombras se perpetuaron en las paredes. Las vimos aparecer. ¿Te acordás? ¿Te acordás que las vimos? Pero yo no pensé que fueran a quedarse, ahí, moviéndose como si siempre hubiera viento entrando por las ventanas que están cerradas. Hay una sombra que está cansada de reírse. ¿La ves? Es probable que se muera muy pronto de tanto reír. Traté de arrancarla de la pared para evitarle la muerte. Pero las sombras como la risa caen por su propio peso cuando terminan. Yo quisiera saber si estás escuchando lo que te digo. ¿Estás escuchando? ¿Me escuchás? Porque te veo de espaldas. Hay una sombra trepándote por el tobillo izquierdo. Lo hace con cuidado para que no la sientas. Eso es lo que hacen las sombras ¿Sabés? Y aunque estés de espaldas sé que tenés los ojos cerrados. Pero tal vez no te diste cuenta porque siempre estás viendo cosas. Aún cuando dormís estás viendo cosas que después me contás. Y yo te lo cuento ahora porque te olvidás de todo. Lo que yo te digo te lo digo porque no te diste cuenta solo ¿sabés? Yo estuve bastante tiempo buscando la forma de estar tranquila en esta hamaca. Me senté acá porque estaba un poco cansada de todo lo que caminamos Me gustaría que te dieras cuenta de que estuve cansada y que necesité llegar a la hamaca para mirar a las hormigas desde tan alto que son invisibles. Como vos y como yo. Nos volvimos invisibles. ¿Viste eso? ¿Viste que somos invisibles? Como las hormigas vistas desde acá. Pero ellas siguen caminando. Seguro. ¿Sabías que las hormigas se mueren en lugar de quedarse dormidas? Caminan hasta morirse. Yo en cambio quería llegar a esta hamaca que por suerte colgamos de esta grúa de puerto. Y desde acá te miro, de espaldas. Estoy segura de que no escuchás. ¿Dormís? Ey, shhh, no, tranquilo. Quería preguntarte solamente si me estás escuchando. Pero está bien. Dormí. Yo voy a estar acá. Si el viento sopla fuerte y logra abrir las ventanas tal vez empuje a la grúa y caiga. Pero no. Tranquilo, no te preocupes. Dormí. Yo sé caer.

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